Para hablar de mí, me faltas tú.

Eres mi sonrisa nº

contador de visitas

''Lo bueno se hace esperar''.


No se trata de entrar en el laberinto, llegar al centro y después salir. Se trata de nuestra seguridad al momento de dar el primer paso. Poco a poco nos damos cuenta que es imposible volver atrás porque nos perderíamos, y que el único amigo que tenemos es el destino que nos ayuda  mirando desde arriba cada uno de nuestros movimientos. ¿Por qué pensamos que en el centro de todo esto hay alguien esperándonos? quizá esa persona también está perdida y la encontramos en el camino, nunca sabemos donde esta lo mejor. O podemos encontrarnos con gente que nos enreda con encantos y nos suelta con mentiras; pero como dicen lo bueno tarda en llegar.
Al principio tenía miedo, ahora estoy adentro, no sé si voy por la mitad, no sé si estoy perdida, no sé si hago lo correcto, pero me encanta descubrir cosas nuevas cada vez que doy otro paso hacia adelante, me encanta descubrir un poco mas de ti cada vez que te tengo.

Mi último deseo.


Le cerré la puerta a tus errores, tus caprichos y tu amor desenamorado. Pero aún hay una ventana abierta, donde puede entrar una persona que me ayude a sanar mi corazón, que me haga brillar los ojos robándome miles de sonrisas. Prometo no cometer el mismo error y dejarme llevar por el momento, no prometo amar sin medidas y dar abrazos para hacer sentir bien, tú te los llevaste y jamás los devolviste, pero cosas nuevas renacerán ¿será correcta mi decisión? y también quiero decirte que lo que ahora hago es por mí, no por ti... ya he hecho lo suficiente, olvidarte no puedo, pero no lastimare otros sentimientos por venganza. Te volverás un gran recuerdo, tu y esa despedida ¿Ya comienzas un nuevo capítulo? yo igual continúo mi historiaMi último deseo: sé feliz.

¿De quién?



Todavía no entiendo como no se detuvo el tiempo, aquella noche que  estuviste conmigo y me brindaste un abrazo para alejarnos del olvido. Te amé con locura, y en tus ojos me vi reflejada cada momento, pero con el paso del tiempo logré darme cuenta del veneno que transmitían tus labios. Y ahora intento escribir algo absurdo que no va a sanar el dolor que siento,  no logro dejar de pensarte ¿De quién habrá sido la culpa? ¿Tuya por hacerme tan feliz o mía por enamorarme de alguien que me hacía sentir única?